Muchas personas me han comentado que les cuesta comer saludable porque es algo que se sale de su presupuesto, la verdad es que si no tenemos una organización podemos dejar mucho más dinero en las compras del que teníamos planeado porque nos dejamos llevar por el momento, ¿ A quién no le ha pasado que iba al supermercado a comprar 3 cositas y termina con el carrito lleno?.
La clave para llevar una alimentación balanceada, es que seamos conscientes que debemos hacer compras balanceadas, desarrollar el hábito de comprar saludable porque luego será la comida que tendremos en nuestra hogar para nutrirnos.
Hoy quiero compartirte varias estrategias para que no tengas que gastar mucho dinero o tiempo, para empezar a llevar un estilo de vida saludable, en especial si tenemos niños en nuestro hogar. Como padres tenemos la responsabilidad de que nuestros hijos obtengan la comida correcta para que crezcan y se mantengan saludables y a su vez enseñarles también cómo comer bien para futuras generaciones.
Estrategias para comprar y comer saludable:
Primordial es la organización: Tomarnos un momento y crear el menú de la semana, cuando sabemos los ingredientes que necesitamos nos permite enfocarnos en lo que verdaderamente vamos a usar, te permite ahorrar y a la vez incluir variedad a tu alimentación, porque así nos damos la oportunidad de experimentar nuevas recetas.
Haz inventario de lo que ya tienes en casa de acuerdo a la lista que hayas hecho del menú de la semana, así evitas comprar otra vez ese alimento.
Evita hacer mercado con hambre! Estarás tentada a comprar alimentos que realmente no necesitas.
Ahorra tiempo, organizando comidas con lo que te sobro. Ejemplo si el lunes cocinaste pollo al almuerzo, puedes usar las sobras haciendo un salteado de pollo con vegetales al día siguiente o agregarlo a tu arepa con aguacate.
Cocina en grandes cantidades y luego divide en porciones para otras comidas y congélalas para esa ocasión.
Organiza tus meriendas al igual que organizas tus comidas principales, te permitirá comer saludable y evitar gastar en alimentos que no suman a tu salud.
Incluye más proteína vegetal a tu menú de la semana en vez de pura proteína animal, por lo menos 2 o 3 cenas semanales, te permitirá ahorrar y a su vez puedes tener un plato balanceado.
Compra frutas y/o verduras de temporada en mayor cantidad, las preparas, cortas y congelas la porción que nos vayas a usar en la semana, te ahorrarás tiempo y dinero.
Visita las ferias de hortalizas locales y si puedes llevar a tus hijos mejor, para que se vayan familiarizando.
Prepara tu propio aceite en spray, puedes comprar aceite de oliva extra virgen y una botella con spray (si es de vidrio mucho mejor), te permitirá tener mayor control del aceite que usas (te ahorras dinero y calorías) y logras que sea uniforme en tu sartén.
Cada vez que vayas al supermercado compra una especia diferente de la que sueles usar para que tengas variedad de sabores en tu comida, así reduces la cantidad de sal que usas y no te aburres de tener siempre el mismo plato.
Compra a granel aquellos alimentos que quisieras experimentar pero no lo usas con mucha regularidad.
Comer saludable es de las mejores cosas que podemos hacer por nosotros mismos y nuestra familia, es una muestra de amor diaria.
Recuerda esta es una jornada de aprendizaje continuo en el que debemos honrar nuestro progreso, toma un pequeño paso a la vez para que sea sostenible en el tiempo. Decide cual recomendación te gustaría aplicar en tus próximas compras y experimenta por 15 días y luego vas agregando otra recomendación y así sucesivamente.
Espero que estos tips sean de ayuda.
Comparte esta información con quien lo necesite, vamos juntos a sumar salud y bienestar.
Te deseo un día saludable
Gabriela Al-Atrache.
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